sábado, 4 de marzo de 2017

Más cámaras...Menos videojuegos




Cada día son más los comentarios que se escuchan de madres, padres, docentes, psicólogos, psicopedagogos y personas que tienen niños a su cuidado, acerca de su preocupación por el excesivo tiempo que los pequeños pasan ensimismados en los videojuegos. Es muy común ver en cualquier lugar niños que mantienen sus ojos en la pantalla del videojuego y ni siquiera levantan la mirada para ver a su alrededor, incluso en un parque, en la playa etc. lugares donde se supone los niños deberían estar jugando, corriendo, divirtiéndose con otras actividades.

La intención de este post es invitar a los padres, a que comiencen un ejercicio con sus pequeños: "Más cámaras, menos videojuegos". Es un ejercicio que busca disminuir, paulatinamente, las horas que los niños dedican a estos juegos, y ganar horas dedicadas a el conocimiento y práctica de la fotografía.

En anteriores posts he hablado sobre la fotografía como opción para que los niños practiquen una actividad extracátedra. Con la fotografía los padres tienen muchas posibilidades de motivar a sus peques a aprender mientras se divierten, lo interesante está en invitarlos mediante juegos, para que poco a poco se familiaricen con el uso de la cámara y luego se concentren en la realización de retos fotográficos. Con esto lograrán dedicar tiempo a esta práctica y una vez que se enamoren de ella , ellos mismos comenzarán a crear nuevas dinámicas, nuevos juegos e ideas que pueden poner en práctica. No es necesario dotarlos de una cámara costosa, esa camarita vieja que ya no usas puede servir en los primeros pasos, también un celular o culaquier dispositivo que tenga cámara fotográfica servirá para iniciar este proyecto.

Con la práctica de la fotografía los niños aprenderán a mirar de una manera diferente su entorno, a fijarse más en los detalles, a conocer las formas, las texturas, los efectos de la luz, entre otros temas. Los ayudará a disfrutar del ambiente que los rodea. Y no necesariamente tienen que salir a la calle a hacer fotos, ya que en casa también hay muchas opciones para practicar. Los padres pueden sugerir juegos donde ellos también participen (sesión de fotos, lightpainting, hacer caja de luz)* y también establecer retos semanales para que los niños cumplan, por ejemplo: el reto de los colores (fotografíar objetos de un mismo color-un color por semana), el reto del abecedario (encontrar letras en cualquier lugar y fotografiarlas hasta completar el abecedario), el reto de la planta (hacer un germinador y documentar con fotos el crecimiento de la plantita).

Los niños también pueden divertirse mientras hacen y editan sus fotos con estas apps de fotografía para niños. Con estas aplicaciones, los niños pueden agregar efectos a sus fotos, texto, pueden incluso hacer stop motions divertidos. Estas aplicaciones "se parecen" a los videojuegos, en el sentido de que también se usan con dispositivos móviles, pero no contienen elementos que pudieran resultar violentos, por el contrario, sirven para que el niño despliegue su capacidad visual creativa pero con el uso de elementos como pinceles de colores, filtros, stickers, animaciones, etc.

La idea es distribuir el tiempo libre de los niños e ir acostumbrándolos poco a poco a integrar la fotografia en sus actividades cotidianas, que además de constituir una actividad placentera y creativa puede convertirse en un lenguaje gráfico para expresar ideas y emociones. La fotografía además, provee a los niños de un recurso que puede ser usado como apoyo en su desarrollo escolar.

Más cámaras....menos videojuegos.



Mayela Fabbiani



(*) posts anteriores
Imagen: freepik.com