Los niños traen consigo una creatividad nata. Desde temprana edad dan muestras de esa vena creadora, que tiene orígen en su prolífica capacidad imaginativa. Desde pequeños, van descubriendo el mundo que les rodea, los espacios, los objetos y las personas y van desarrollando intuitivamente algún tipo de talento asociado a su inteligencia visual.
Como padres y docentes, deberíamos tener la responsabilidad, y además el placer, de mostrarle a los niños las muchas maneras mediante las cuales pueden explorar, descubrir, crear y poner al descubierto sus habilidades y talentos. Debemos ser cuidadosos, y sobre todo pacientes. darle su tiempo para que vayan probando diversas actividades en las cuales puedan expresarse a plenitud.
Hoy en día, la fotografía es un recurso que se encuentra a nuestro alcance. Existen infinidades de modelos de cámaras digitales, y los teléfonos celulares tienen cámaras que dan muy buenos resultados. El boom fotográfico llega también a los niños y adolescentes, lo que la convierte en un camino para que ellos se expresen. La fotografía es una disciplina perfecta para descubrir el mundo a una edad temprana, pero lo ideal es que los niños cuenten con una orientación que los ayudará a sacarle el máximo provecho, a poder usarla como medio de recreación, de documentación y de expresión artística.
Si en la familia hay niños que tienen inclinación por la Fotografía, lo ideal es aprovechar su entusiasmo inicial para motivarlos a descubrir sus habilidades. Una vez que comiencen a sentirse más seguros con una cámara en mano, hay que comenzar a darles orientación en cuanto a los aspectos técnicos del manejo de la cámara y algunos conceptos básicos sobre composición de imágenes, siempre con un lenguaje sencillo y sin sobrecargarlos de información. Al mismo tiempo, haciendo uso de juegos y dinámicas divertidas, ya sea en casa o en paseos al aire libre, los niños se engancharán a la Fotografía y la convertirán en su camino para mostrar su talento. Acompañar a los niños en la aventura fotográfica y convertir, junto a ellos, cualquier lugar en espacios para asombrarse, experimentar y crear, es la clave.
Mayela Fabbiani
Imagen: Vanessa Skrainka
Artículo publicado en Inspirulina.com
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